NO ÉRA BURRO, NO, MAS BIEN SABIO
NO ÉRA BURRO, NO, MAS BIEN SABIO
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Caminaba crispado a la contra del mundo,
si la brújula apuntaba al norte Él iba hacia el sur,
despedía rápidamente al sol, dándole Irreverentemente
la espalda, gruñía a cuantos se topaba,
ignoraba el salitre del mar, negaba el rumor
del viento y le achacaba la culpa a los juncos
que acariciaban su calva, ¡Si, bien digo calva!
Tenía rizos de oro, pero un buen día se reflejó
en el espejo, se vió distinto . . . y pensó: Este jóven
apuesto no puedo ser yo; se sintió burlado
y se rapó.
El otro, con amor, le decía al pasar: ¡Eh! Esos ojos
esmeralda son mitad campiña y mitad tristeza.
Ácido, malhumorado se encontró con un asno
que comía berzas y pensó: Ufff lo que le faltaba
a este asno, a su vez pensaba éste: ¡Vaya lechuguino!
con ese porte negado, silente, cuanta sabiduría
perdída en este espacio.
Verde, como sus ojos, dicen que se leyeron el pensamiento,
echó a correr hasta el río, besó su imagen
y la ternura le invadió.
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* Soy una hojita * 03/05/09
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